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Ascética

El buen uso de mi tiempo

No es fácil determinar si vivimos con más tiempo o con menos tiempo que en épocas pasadas.

Es cierto que la velocidad de la rotación de nuestro planeta se ha conservado casi inalterada (o con variaciones insignificantes) durante milenios. El hombre de hace 25 siglos podía contar, igual que nosotros, con 24 horas cada día.

Pero aquel hombre, ¿tenía más tiempo o menos tiempo que nosotros? La abundancia o la carencia de tiempo depende de diversos factores, que han cambiado mucho durante siglos.

La necesidad de la supervisión ¿Somos personas sólo de principios?

1)Para saber

En un artículo pasado considerábamos la importancia de proponerse algunas metas que valgan la pena. Pero luego viene la parte difícil que es cumplirlas. Para llevarlas a cabo es muy recomendable su supervisión. Esto se puede hacer teniendo un tiempo dedicado especialmente a revisar el avance, progreso, o incluso retroceso, del propósito formulado.

Saber educar nuestras reacciones

Dos historias distintas

1) Para saber

En el actuar humano, ante ciertos estímulos negativos, se dan ciertas reacciones inmediatas, casi automáticas. Son reacciones primeras. Por ejemplo, cuando ante un dolor o golpe, la persona grita o dice una mal palabra. Aunque muchas veces no comportan maldad moral grave al no ser plenamente voluntarias, es posible ir educando esas reacciones y llegar a tener un dominio sobre ellas.

Hígado encebollado

Ante las débiles personalidades que hoy en día constatamos en algunos adolescentes, que se quiebran como frágiles copas de cristal frente a pequeñas adversidades, queremos proponer una posible solución que ayude a los padres de familia y a los formadores: darles de comer “hígado encebollado”… El ejemplo de una familia nos puede iluminar al respecto.

Apenas subir a la camioneta, después de que mamá les recogía de la escuela, venían las preguntas acostumbradas: “¿qué hay de comer hoy, mamá? ¿De qué es la sopa? ¿Y el postre?”

En la muerte de Alejandro Magno. Al inicio de la Cuaresma

En la muerte de Alejandro Magno

Al inicio de la Cuaresma

1) Para saber

Con motivo de la Cuaresma, el Papa Benedicto XVI ha escrito un mensaje tomando como tema el ayuno. Nos pone como ejemplo a nuestro Señor Jesucristo quien “después de hacer ayuno cuarenta días y cuarenta noches, al fin sintió hambre” (Mateo 4,2).

El Papa desea que valoremos y demos el verdadero sentido al ayuno. El alimento de suyo es bueno, por ello, privarnos en cierta medida de él, significa que de él proviene un mayor bien.

Decálogo Cuaresmal

Decálogo Cuaresmal

1. Romperás de una vez por todas con lo que tú bien sabes que Dios no quiere, aunque  te agrade mucho, aunque te cueste “horrores” dejarlo. Lo arrancarás sin compasión como un cáncer que te está matando. “¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero si arruina su vida? (Mc 8, 36)

Cuaresma y la ascésis

Cuaresma y la ascésis  

La Cuaresma, ha sido siempre considerada en la Iglesia como un tiempo propicio para crecer en la santidad dejando que Dios purifique, mediante nuestra oración, nuestros corazones. Ha sido, al mismo tiempo, un espacio en la vida del cristiano para reforzar su vida penitencial o ascética, sin la cual difícilmente permitirá que Dios lo lleve a conocer la perfección de su amor.