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libertad

El optimismo y el caracol

El optimismo y el caracol

 “Imaginemos un caracol, un caracol de jardín. Recorramos con la mente la espiral que decora su concha y que le sirve de casa. Pensemos en la manera en que disfruta la humedad después de la lluvia. Parecería que le entusiasma tanto como a algunos de nosotros cuando retozamos entre las olas del mar .

 En el interior de la cubierta de roca de un caracol, así como dentro del ser más admirable y amado se encierra la historia del cosmos. Conocerlos a profundidad sería entender en detalle cómo se originó el universo.

Filiación divina, segunda parte

Dios nos conoce hasta el fondo. Ninguno de nuestros esfuerzos se le escapa. El nos sostiene. Es siempre como un padre que enseña a sus hijos a dar sus primeros pasos. Dios es el único que da realmente la alegría. Nos imaginamos que a veces Dios nos aplasta con una mole de sacrificios, cuando son precisamente ellos los que nos alivian. Dios es sensible a nuestras delicadezas, dice Gabriela Bossis. Nada se pierde de los cuidados que damos a nuestra alma y a las almas de los demás. Nosotros no lo vemos pero en el Cielo sí nos ven.

Familias Fuertes y Unidas

Siendo el más precario de los seres humanos, el hombre requiere, para existir, de la aceptación de dos personas ajenas a él que en un momento determinado se unen y, en un acto supremo de libertad, le dan la vida. A partir del momento de la concepción, su existencia va a depender del amor, y su equilibrio, en parte, del de sus padres.

La familia es un islote privilegiado dentro de una sociedad despersonalizada. Debemos por ello preguntarnos cómo se potencia a la familia en su unidad y en convivencia y la amistad de sus miembros.

Por muy malo que parezca

Poco antes de su martirio, santo Tomás Moro consuela a su hija con estas palabras: “Nada puede pasarme que Dios no quiera. Y todo lo que Él quiere, por muy malo que nos parezca, es en realidad mejor”.

Me acorde de esta frase al ojear el periódico hace unos días.

Dioses de nuestro tiempo

Estos dioses cambian frecuentemente de cara y de lenguaje, se procrean e inventan nuevos engaños. Son máscaras de Satanás, quien tiene la propiedad de mimetizarse y transformase como la mentira, ya que no está sujeto al "sí, sí, no, no" de la verdad, que es una sola y no se disfraza. 

I. El dios del progreso

Solidaridad mexicana

“La actual crisis financiera en Estados Unidos, es una tragedia de enormes dimensiones.  Sin embargo, en México, somos un pueblo solidario y los miembros de cada familia se ayudan entre sí”.

La frase anterior que leí esta semana por el internet,  no he dejado de pensarla.

¡Cuánta razón tiene el que la escribió!